LUGARES SENSIBLES, ESPACIOS SAGRADOS
En todas las tradiciones religiosas somos llamados a tratar a todos con amor, dignidad y respeto. El memorándum sobre lugares sensibles fue rescindido para centrarse en los lugares de culto porque la administración sabe que son lugares de bienvenida para todos.
Como parte de su compromiso de llevar a cabo deportaciones masivas, la administración Trump ha rescindido una antigua política del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que restringe sustancialmente a los agentes del ICE la realización de detenciones de inmigrantes en o cerca de «lugares sensibles» como hospitales, escuelas y lugares de culto. Se trata de una política que ha estado vigente en diversas formas desde los años 90’s y en su forma actual desde 2011.
Al hacerlo, los lugares de culto son blanco de ataques específicamente por sus creencias religiosas de tratar a todos con amor, dignidad, respeto y compasión, independientemente de quiénes sean o de dónde vengan.
Aunque no creemos que los lugares de culto o las comunidades religiosas deban ser inmunes a las leyes o a la supervisión del gobierno, creemos que en el fondo de esta decisión de rescindir la política está la intención de atacar a los lugares de culto porque son espacios de acogida e inclusión.
Se trata de una infracción drástica e innecesaria y una carga sustancial para la libertad religiosa de millones de estadounidenses sin un interés gubernamental convincente.
Como persona de fe, hago un llamamiento a la administración Trump para que revoque la rescisión del memorándum y al Congreso para que apruebe una legislación que ofrezca una mayor protección contra las redadas de inmigración que se llevan a cabo en o cerca de lugares de culto y otros lugares sensibles.
FIRME LA PETICIÓN
Esta petición se entregará al presidente, al secretario del Departamento de Seguridad Nacional y a todos los miembros del Congreso.